Si te da trabajo concentrate, te distraes con facilidad, sientes que llevas horas estudiando pero en realidad no avanzas, entonces debes conocer estos 6 tips que te ayudarán a vencer tus problemas de concentración:

1. Descanso
Sin duda, el punto más obvio es, como siempre, el más importante y el que más dejamos de lado, especialmente después de ingresar a la universidad. Es imposible mantener una concentración adecuada si tu descanso deja mucho que desear: el descanso nocturno ayuda a fijar los conocimientos adquiridos durante la jornada de estudio y es fundamental para tener una mente despejada y receptiva al día siguiente
 
2. Reducir el estrés
Hay situaciones en la vida que nos estresan mucho más de lo que toleramos realmente, y nos sobreponemos como podemos, pero pasan factura: entre otras cosas, el estrés afecta a tu capacidad de concentración. No es extraño que los niños y niñas que viven en ambientes conflictivos presenten problemas de concentración, más allá de los propios derivados de la situación, de forma crónica a lo largo de los siguientes años. Sin embargo, con motivos de menor gravedad, también podemos tener una respuesta al estrés nociva para nuestro estudio:el ejercicio y la relajación son los dos aliados clave antes de una dura jornada de estudio.
 
3. Planificación
Te vas a poner a estudiar. Perfecto ¿por dónde empiezas? Lo primero por lo que debes empezar es por aquello de dificultad media; a medida que avanzas en tu lista de tareas, irás subiendo la dificultad de éstas para acabar por las más ligeras: lógicamente, si tu concentración decae a lo largo de las horas, deja lo más sencillo para el final.
La técnica pomodoro funciona muy bien para jornadas muy largas: se trataría de un intervalo de 25 min estudiando a pleno rendimiento con un descanso de 5 minutos sin hacer nada, ni pensar en nada, relacionado con lo que estás estudiando. Cada dos horas, te recomendamos descansar 20-30 minutos.INTÉNTALO!!!
 
4. Priorizar
Hay que empezar a distinguir lo superfluo de lo esencial y lo sencillo de lo difícil, como apuntabamos en el punto 3. Lo urgente y esencial tienes que hacerlo YA: lo no urgente y esencial es un trabajo a repartir en porciones a lo largo de los días. 
5. Evitar distracciones
Apaga el móvil o siléncialo, sin vibración. Sal de Facebook, de Twitter, cierra Instagram y de todo aquello que puede distraerte, salvo que sea imprescindible para lo que sea que estés haciendo. Cierra la puerta, pide silencio, o vete a estudiar a un centro de estudios.
6. Hacer ejercicios específicos
Hay ejercicios específicos para mejorar la concentración, en caso de estar atrofiada, pero estos se los diremos en otra entrega.
 
Esperamos que estos tips les sean de utilidad y les ayuden a concentrarse mejor