El cerebro humano es un órgano único y maravilloso. Tanto es así que puede ser estimulado por los sonidos adecuados para dar el máximo, y no es algo que nos inventemos, está científicamente demostrado. Por eso te queremos mostrar cuál es la mejor música para estudiar e interiorizar conceptos. Usar música para concentrarse en una gran idea por una sencilla razón: activa la actividad de la hormona llamada dopamina, que es la que ayuda en las conexiones sinápticas, donde se produce el aprendizaje, la asimilación de conocimientos y la memorización.

 

Es decir, que la música, en especial la clásica, ayuda a relajarse y, además, facilita la concentración. Ambas acciones son básicas para mejorar el rendimiento. No obstante, recuerda que esto puede variar entre individuos, pero, en general, siempre es positiva, sobre todo si te gusta. Antes de conocer el tipo de música ideal, es importante conocer algunos beneficios de la música para concentrarse. Decenas de estudios científicos han demostrado los beneficios de la música. De hecho, sabemos que es positiva para:

 

Activar emociones.

De esta forma, a través de sensaciones agradables, descubrimos que, al asociarse al placer, ayudan a potenciar la memoria y el recuerdo, lo que es fantástico para el estudio.

 

Ampliación del léxico.

También ayuda a que hablemos mejor y con profusión de vocablos. Se debe a que escuchando música a diario desarrollamos un vocabulario más completo por el fomento de las relaciones neuronales que provocan las palabras que riman y suenan agradables con el sonido. 

 

Resistencia física.

Desde un punto de vista físico, también ayuda a aumentar la resistencia hasta en un 15%. En este caso, el pop y el rock son los mejores para ser más resistentes.

 

Incrementa la imaginación.

También ayuda a fomentar la imaginación, ya que potencia el área creativa del cerebro y amplía nuestros horizontes mentales.

 

Mejora el sistema cardiovascular.

Igualmente, el hecho de escuchar música potencia el sistema cardiovascular, ya que la sangre circula mejor, lo que provoca un estado físico y mental más equilibrado y beneficioso.

 

Entonces ¿qué música escuchar para concentrarse, estimular el cerebro y mejorar el proceso de estudio?

 

Música clásica:

siempre se suele recomendar la música clásica para el estudio. De hecho, se dice que algunas composiciones de Mozart estimulan el cerebro y relajan de manera formidable para mejorar la memorización y la adquisición de conocimientos.

 

Jazz suave:

escuchar música estridente no suele ser productivo para el estudio, pero el jazz suave, eso que habitualmente y en tono jocoso llamamos música de ascensor, sí que puede ser muy eficiente.

Música para la concentración:

existen listas de reproducción diseñadas en sí mismas para promover la concentración, estudiar mejor y ampliar la memoria. Constan de melodías con poco ritmo y muy suaves.

 

Sonidos naturales:

también escuchar los sonidos de la naturaleza ayuda a la concentración y la optimización del estudio. Se pueden personalizar, pues existen personas que prefieren sonidos repetitivos y con ritmos más elevados, y otras que optan por la suavidad de la lontananza.

 

Ya conoces según la ciencia cuál es la mejor música para estudiar y estimular tu cerebro. Ponte manos a la obra, encuentra tu sonido y descubre cómo puedes mejorar en todos los aspectos para memorizar mejor y aprender mucho más.